Abel Visconti: "Hacer música en familia es un regalo de Dios"
Viernes, 29 Septiembre 2023 19:00

Abel Visconti: "Hacer música en familia es un regalo de Dios"

El reconocido músico, autor, compositor y cantante; fundador del dúo Los Visconti, conversó en Íntimamente con Alejandra Rubio sobre la bendición que es el haber trabajado y trabajar toda su vida en familia. También dialogó de su infancia, como con su hermano mellizo se convirtieron en “Los Reyes del Valsecito” y como, a sus 91 años y con más de 75 años de carrera, está más vigente que nunca y con muchísimos proyectos por delante.

Arnaldo Abel Visconti nació un 11 de junio de 1932 junto a su hermano mellizo Victoriano Félix (conocido luego como Víctor), en Coronel Dorrego, Provincia de Buenos Aires. Integrantes de una familia numerosa de once hermanos, su infancia no fue fácil, junto a su hermano lustraron zapatos, vendieron frutas, pelaron maíz y hasta anduvieron cartoneando. Pedían latas, botellas, gomas viejas, descartables para vender con un carro o cambiaban changas por monedas.

Su padre, que fue un perseguido político por ser radical, falleció repentinamente cuando ellos tenían apenas 12 años. Su madre viendo su gusto por la música, pese a la mala situación económica que vivián, se atrasó con el pago del lechero para comprarle su primer guitarra y desde ese momento su vida cambió y se volvió inseparable del instrumento.

Los hermanos soñaban con cantar, como lo anheló alguna vez su tío, el payador don Luis Acosta García, quien falleció antes de los 40 años, pero le alcanzó para componer Mis harapos, Dios te salve mi hijo y El Doradillo Mentao.

Abel y Víctor se fueron a Buenos Aires a buscar nuevos horizontes cuando tenían 18 años. "Empecé a cantar en las mismas cantinas del Abasto donde lo hacía Carlitos Gardel y tengo hermosos recuerdos de esa época, todavía no éramos Los Visconti, pero empezamos a trabajar mucho en las cantinas. Empecé a cantar en las mismas cantinas del Abasto donde lo hacía Carlitos Gardel. Cantábamos más de 30 canciones por shows y éramos felices." Recordó Abelito.

"Antes de recorrer el mundo hicimos mucho en Buenos Aires. La gente nos empezó a conocer porque trabajábamos en La Querencia, una confitería que era un orgullo para la Argentina, en Avenida de Mayo 870. El cartel decía “Los Hermanos Visconti”. Usábamos la misma ropa que utiliza El Chaqueño Palavecino, pero todo de raso: pañuelo blanco, botas negras y poncho rojo de alpaca. Después estuvimos con Angel Vargas, con Hugo del Carril y hasta con Azucena Maizani, una leyenda", recordó Visconti.

En 1950 decidieron conformar un dúo con el nombre “Los Hermanos Visconti”, pero recién al presentarse en el festival de folklore de Cosquín en 1974, Héctor Larrea (quien ocasionalmente era el conductor) los presentó simplemente como “Los Visconti” y fue tanto el éxito obtenido en esa presentación, que se quedaron para siempre con el nombre que les dió el presentador y desde entonces se convirtieron en uno de los grupos más populares y difundidos de Argentina, alcanzado también un importante éxito en otros países latinoamericanos, especialmente Colombia, Ecuador, Bolivia y Venezuela.

Con un estilo melancólico, con un sello distinto en el cancionero criollo, los valsecitos hicieron que este dúo fuera reconocido mundialmente. Su música se caracterizó por el aire romántico y emotivo de sus canciones, principalmente por la interpretación de valsecitos criollos, por lo que se convirtieron “Los reyes del valsecito criollo”.

La voz y las notas de la guitarra de Abel y su hermano mellizo enamoraron a varias generaciones. Muchos jóvenes conocen su obra gracias a sus padres y abuelos, quienes desde la sala de sus hogares más de una vez han entonado clásicos como: Mama vieja, Ódiame, Ándate, Quema esas cartas, entre otros.

La leyenda viva de nuestra música, refiriéndose a dónde cree que estuvo la clave de su éxito, remarcó: “Realmente no lo sé, fue designio de Dios. Te voy a contar una anécdota que nos pasó en Atlanta (Estados Unidos). Había una señora que no entendía ni una sola palabra del castellano. Nosotros nos pusimos a afinar la guitarra, mientras ensayábamos unos valsecitos, pero bien bajito. La señora vino llorando y a través de un traductor nos dijo que esos valsecitos le llegaron al alma. Nuestra música le llegaba a la gente, aunque no entendiera una palabra. Soy un privilegiado. Aún hoy, en distintas partes del mundo, aman nuestros temas. Tengo pendiente 18 shows en Colombia, que todavía no pude reprogramar las fechas”.

Tan unidos eran los hermanos, que solo podía separarlos la muerte y lamentablemente eso ocurrió el 11 de abril de 2005 cuando falleció en Buenos Aires, Victoriano Félix (Víctor) Visconti a los 71 años, víctima de un cáncer pulmonar. Sus restos reposan en el cementerio de barrio Chacarita de la capital argentina, al lado del mismísimo cantante de tangos Carlos Gardel.

Abelito no bajo los brazos y después de un tiempo, como lo hubiese querido su hermano, subió nuevamente a los escenarios y hasta hoy recibe la ovación y el cariño constante del público. Su esposa argentina, con quien llevan casi 60 años de casados y su hermosa familia, hicieron todo para que no recayera y regresara a los escenarios que es su vida.

 Recibió infinidad de premios y reconocimientos nacionales e internacionales, discos de Oro, Platino, bandejas, el Jazmín de Oro de Cosquín... pero para él el mayor premio es el reconocimiento de la gente:”El mayor orgullo es que en cada lugar en el que cantamos, la gente no nos deja ir y me demuestra su afecto constantemente. Hasta cuando salgo a la calle me gritan ¡Fuerza Abelito!”.

El mellizo más famoso del Folklore, con 91 años, sigue jugando a la paleta, haciendo ejercicios diarios de respiración y con su voz intacta. En su presente, continúa promocionando su último disco (que grabó con la Sony)”Dúos que llevo en el alma y el corazón”, que fue dirigido por su hija Graciela y en el que contó con el canto de su hijo Daniel. Además de seguir reclamando sus actuaciones por toda Argentina, en Colombia, Ecuador y hasta en Estados Unidos.