"Soberbio, violento y final: Alberto lo hizo"
Jueves, 02 Marzo 2023 15:31

"Soberbio, violento y final: Alberto lo hizo"

Escuchá el comentario editorial de Cristina Pérez.

Para desmentir al presidente, no hace falta más que escucharlo a él mismo. 
 
Sin embargo, ayer fue mucho más allá de contradecirse. Ayer fue mucha más allá, en la emboscada que le preparó alevosamente a los jueces de la Corte. Tenían planificados hasta los planos para el escrache en plena cadena nacional. Un escrache que es parte del apriete mafioso para el que se está usando al Congreso con un juicio político con chances nulas y pruebas nulas, y que tiene un único fin: la impunidad de Cristina Kirchner. 
 
El presidente, manchando su investidura usó la apertura de sesiones ordinarias, para atacar al Poder Judicial y por lo tanto para atacar a la república. Lo hizo a traición, teniendo a los dos jueces que presiden la Corte sentados a sólo metros, invitados a su propia lapidación. No sólo los atacó personalmente, sino que atacó el poder que representan. De la misma manera no sólo exhibió la furia de un patotero sino la bajeza a la que hizo descender la figura de un presidente, de quien debe representar al pueblo argentino y respetar las leyes pero que se consagró a los gritos como un presidente faccioso. 
 
Para desmentir al presidente, ni siquiera hace falta pedir opiniones, alcanza escuchándolo a él mismo. Pero les pido que, teniendo presente su ataque furibundo, escuchen lo que decía antes de estos mismos jueces supremos. 
 
Es el mismo Alberto Fernandez que decía que lo de Nisman de ninguna manera era un suicidio hasta que cambió de idea .
 
Es el mismo Alberto Fernandez que decía que era crítico del cepo. 
 
Es el mismo Alberto Fernandez que prometió aumentar las jubilaciones con lo que se paga de intereses de las Lelic. 
 
Los jueces, Nisman, el cepo, las jubilaciones. Y podríamos seguir. 
 
¿Quién es Alberto Fernandez? ¿Mentía antes o miente ahora? Desde que empezó el mandato nos hacemos la misma pregunta. Y quizás la respuesta más probable es que ninguno. Que tenemos un presidente que cambia de opinión según le conviene y a quien la verdad no le importa en lo absoluto. O sea que lo que no le importa es mentirnos a todos en la cara. 
 
Pero es aún peor, porque además al presidente no le importó falsear la realidad recortando los datos que cree que lo favorecen, como si pudiera pasar desapercibido que las cuestiones que más le importan a la sociedad son las que menos le importan a él: inflación, pobreza e inseguridad.
 
A 24 hs de su patético espectáculo, el camporista Andres Cuervo Larroque salió a dejarle claro que ni arrastrarse le alcanza.
 
Soberbio, violento y final Alberto Fernandez no logra ni ser presidente del grupo político sectario que lo puso en el poder. Y para asumir como presidente de todos, ya es tarde. Ayer sólo vimos el primer acto de quien se irá como entró al Congreso, con la soledad de no ser el presidente de nadie. Alberto lo hizo.