"Cristina se defiende como los culpables"
Miércoles, 24 Agosto 2022 10:08

"Cristina se defiende como los culpables"

Escuchá el comentario editorial de Cristina Pérez.

Cristina Kirchner no pudo defenderse de ninguna de las acusaciones del fiscal Diego Luciani. Por lo contrario, si su mejor defensa es salir a denunciar que los otros también roban, incurrió encima en una especie de admisión de sus delitos. Pero la historia del monólogo confuso y por momentos bizarro que ofreció desde su despacho del Senado es más compleja.

Cuando caía la noche del 22 de Agosto, y aún reverberaba en el aire el alegato más grave por corrupción contra una presidenta en ejercicio, Cristina Kirchner, manifestó en su cuenta de Twitter que había confirmado que estaba ante un “pelotón de fusilamiento mediático y judicial” porque le habían impedido el derecho a la defensa en cuestiones que no estaban en la acusación del fiscal a la que ella había asistido durante 5 días en mayo de 2019. Se refería a la prueba que la desvela, el teléfono de Jose Lopez. Y tenía razón. Ese material no había estado en la acusación de 2019. Lo que Cristina no sabía y le arruinó los planes para el día siguiente era que esa prueba incorporada en 2021 había sido aceptada como tal por sus propios abogados defensores. Por eso lo que quiso ser una denuncia de incongruencia contra el fiscal terminó siendo un ventilador desordenado de datos a la bartola, con sello mafioso, desparramando nombres y embarrando la cancha, durante el cual no le quedó otra que admitir que no sabía que habían introducido la prueba de sus desvelos.

Si Lopez había revoleado bolsos con dólares, Cristina salió a revolear corrupción para salpicar a Dios y María Santísima. En su fueron interno, estaba enfurecida con sus abogados. Como cuenta una alta fuente judicial, “la defensa tuvo la posibilidad de acceder a esa prueba, pero se lo comieron y no le dieron bola”.

La historia del elefante que dejaron entrar al bazar, empieza la misma noche de los dólares en el convento. No hubo un “Ah pero Macri” tan inesperado como el de Cristina Kirchner diciendo que en realidad ese dinero venía del macrismo, como si no hubiera tenido de saberlo, la obligación de denunciarlo ante la justicia, y como si olvidara, que aún ante esa eventualidad, Josecito Lopez fue su secretario de Obras públicas por 12 años. 12. Esos 12 que ella llamó el mejor gobierno de la historia argentina.

En 2018, el fiscal Diego Luciani le pidió autorización al tribunal para ver la causa por enriquecimiento ilícito que se le seguía a Jose Lopez, y también elementos de los expedientes Hotesur Los Sauces, y Ruta del dinero K, que consideraba lo que se llama “comunidad probatoria”. El celular de López dormía en los archivos del juez Rafecas y el fiscal Delgado. Luciani les cargó la batería.

En 2021, presentó de hecho un escrito para informar que iba a utilizar el teléfono de José Lopez como prueba y puso a disposición el CD para que lo viera la defensa de Cristina Kirchner que lo tiene ¡desde 2021!, cuando el material fue incorporado. El problema principal con el que se encontró Cristina Kirchner es que el tribunal había autorizado el uso de esa prueba, y sus abogados defensores también.

Para Diego Luciani, “la prueba de la asociación ilícita es total”, incluida la jefatura. Considera que con el material agregado “todas las piezas coinciden” y “Cristina no puede desentenderse de Baez”. “Los mensajes corroboran todo lo que dijimos”, afirma categórico. Y algo más, que lo que Cristina Kirchner salió a pedir sobre los chats que develó en su mensaje, él ya lo había hecho.

Cristina intentó exponer que se había favorecido a empresarios vinculados al macrismo por no haberlos mencionado en el juicio. Como abogada sabe perfectamente que en un juicio se procede al objeto de la acusación y no a temas que nada tienen que ver. Pero encima la pifió al decir que la fiscalía había hecho la vista gorda ante la comisión de posibles delitos. Quizás debió prestarle más atención al alegato, porque fue ahí que Luciani pidió extracción de todo el teléfono y que se investigara “posibles ilicitudes”.

Entre esos “otros” están todos los que nombró la vicepresidenta, pero para su preocupación, también aparece su hijo, Máximo Kirchner. ¿Qué hacía tomando decisiones sobre licitaciones cuando no era funcionario?

En síntesis, la prueba que Cristina quería denunciar como inválida es válida, y no hubo omisión ni favoritismo en cuanto al contenido del teléfono. Serán numerosos los procesos que se desprendan del celular de Lopez.

El gran problema de Cristina es que no puede defenderse de las graves acusaciones en su contra. Sólo salir a decir que otros también roban. Como si eso atenuara su responsabilidad, o peor, como un código mafioso donde advierte veladamente que si cae ella caerán todos. Al mismo tiempo su espacio transmite mensajes extorsivos y violentos a la sociedad sólo porque la justicia está haciendo su trabajo. El kirchnerismo amenaza y Cristina ataca porque no puede responder a los cargos en su contra.

Encima, queda flotando otra pregunta. Si realmente fue el mejor gobierno de la historia, ¿por qué dejó al país en ruinas cuando se fue? ¿por qué si nunca hubo una mayor bonanza en la historia de la economía argentina, había un rojo de 7 puntos del PBI en las cuentas fiscales? ¿Dónde fue a parar la prosperidad de esos doce años que no devino en desarrollo sino en más y más y más pobreza?