Sergio Federovisky, viceministro de Ambiente de la Nación, explicó que “intimamos al Zoo de Luján desde febrero para que se reconvierta y deje de incumplir sistemáticamente las reglas”, y agregó: “El 2 de septiembre presentamos una última intimación y les dijimos que si no se reconvertían, se procedería a la clausura del establecimiento. Fue lo que se hizo”. Además, marcó que “no puede haber contacto entre las personas y los animales silvestres. Es disparatado pero el zoo lo hizo su atractivo principal”, y aseguró que es distorsivo “pensar que un nene de ocho años pueda darle la mamadera a un león”.
Federovisky también explicó que le pidieron al zoo que les presente el marcaje de los animales “porque vemos con estupor que en una revista aparecen actrices con leones diciendo que lo prestó el dueño del Zoo de Luján”, y continuó: “El establecimiento es privado y, más allá de que la actividad comercial está clausurada, el dueño deberá hacerse cargo de los animales. Luego, decidirá la Justicia”.
